Un informe de la Generalitat dice que la explosión de gas en Santa Coloma se debió a la fuga de agua
El informe señala que no existe legislación que fije las condiciones técnicas mínimas de seguridad para la red de distribución de agua, pero no ocurre lo mismo en el caso de la instalación interior de las fincas. Según Industria, la reglamentación vigente obliga al propietario o abonado a que la entrada subterránea de las fincas esté impermeabilizada, lo que no ocurría en el número 66 de la Rambla del Fondo. Esta circunstancia pudo motivar que el gas, según Industria, entrara rápidamente en el edificio sin que los operarios de Gas Natural ni los bomberos se dieran cuenta hasta el último momento de que había habido una fuga.
El informe descarta la hipótesis de que alguna obra en la calle hubiera causado la fuga de gas al perforar la tubería. 'Si se hubiera perforado por la acción de alguna herramienta, la fuga se habría manifestado inmediatamente', señala. El informe será estudiado por la juez que instruye el caso, quien ha de dilucidar si hubo responsabilidad por parte de Aguas de Barcelona y los dueños de la finca. Ayuntamiento y vecinos afectados han acordado la construcción de un único edificio, que empezará el 12 de enero de 2007 en el solar de la explosión.
Industria considera que la hipótesis sobre la causa de la perforación del tubo de gas 'es que probablemente estuvo sometido a una acción abrasiva hasta llegar a la perforación, muy posiblemente causada por la fuga de agua mezclada con la tierra del subsuelo'. La fuga de agua, de origen desconocido, habría erosionado la tubería del gas mientras abría una cavidad bajo tierra de un metro cúbico de volumen.
Cuando los operarios cortaron el suministro al detectar la fuga de agua, el líquido descendió al nivel de la cavidad y el gas entró por debajo del número 66 de la Rambla de Fondo a través de los pasatubos que bajo tierra conduce la cañería de agua al edificio que se vio afectado por la explosión. Ésta se produjo mientras los técnicos de Gas Natural y los bomberos hacían comprobaciones en el interior del edificio.